Ralph Lauren ha elegido una prestigiosa mansión privada que data de 1683 para albergar su mayor buque insignia europeo. Además de la zona de venta, este lugar único, de unos 2.150 metros cuadrados, reserva agradables sorpresas: un restaurante, Ralph's, y un salón dedicado a los relojes, el Watch Salon.
Con su propia entrada, este último expone las tres líneas de relojes de la marca (desarrolladas bajo el ala de la empresa conjunta de Ralph Lauren y Richemont, Ralph Lauren Watch & Jewelry, creada en 2008) en la planta baja a lo largo de 20 metros cuadrados. El restaurante, por su parte, "celebra la hospitalidad y la cocina en la más pura tradición americana".